jueves, junio 22, 2006

Superhits de los 80: John Hughes (1)

Si hubo alguien que supo captar el espíritu de los ochenta, y que me perdone Mike Seaver, ése fue, sin duda, John Hughes.
Tenía pensado escribir un artículo sobre "El Club de los Cinco" exclusivamente, pero indagando por Internet he tenido que rendirme a la evidencia. Merece un pequeño homenaje.
John Hughes es una especie de hombre renacentista, pero de los ochenta. Escritor, guionista, actor, director y productor, ha abarcado todas las facetas posibles en el mundo del cine, y en todas ha cosechado grandes éxitos. Si bien, es cierto que fue detrás de las cámaras donde obtuvo sus mayores logros durante la década de las muñequeras y los cardados. No en vano, no dirige una película desde 1.991, centrándose, básicamente, en su labor de productor y guionista ("Flubber", "101 Dálmatas", las secuelas de "Solo en Casa", "Daniel el Travieso"...)
Hughes siempre ha apostado por el entretenimiento, por un cine sencillo y simpático. Desde las películas más gamberras, hasta las comedias juveniles, romanticonas, o, últimamente, familiares, siempre ha trenzado historias majas y simples, pero efectivas. Y su influencia es innegable en la mayor parte de las comedias que se han producido en los últimos veinte años. Basta con echar un vistazo a la filmografía de Kevin Smith ("Mallrats", "Clerks", "Dogma"...).
Veamos algunas de mis favoritas (no pierdan de vista las traducciones, por cierto):

"El Club de los Cinco" se rodó en el año 1.985, y desde su estreno se convirtió en una película de culto para toda la juventud de la época. Y no me extraña, porque es cojonuda.
Cinco chavales muy diferentes son castigados a pasar la mañana del sábado en el instituto. Los motivos son variopintos: llevar un arma y esconderla en la taquilla, hacerle una putada a un compañero, escaparse del tuto para ir al mall,...
Esquivando la estricta supervisión del director Vernon (descanse en paz), verán que no son tan distintos como parecían en un principio, y que esa mañana les hará ver las cosas desde otro prisma. Aunque posiblemente, nunca vuelvan a dirigirse la palabra...
Un año más tarde (1.986) Hughes rueda "Todo en un Día".
En ésta, el fantástico Matthew Broderick (Ferris Bueler, qué peacho de nombre) decide que la vida es muy corta, y que pasa de ir al tuto ("Ooou yeah...tu-cu-tú-caaa...", que decía la canción de Yello).
Así que les dice a sus padres que está enfermo (monta un genial dispositivo que hace que cuando se abra la puerta de su cuarto suenen unas toses y su voz languideciendo) y se pira a convencer a su mejor amigo para irse por ahí a hacer el cabra. A pesar de sus reticencias iniciales, acaba aceptando. Así que juntos se van a recoger a la novia de Ferris al instituto. Y en Ferrari (olé, olé y olé...es que es la polla).
Total, que los tres se pasan el día haciendo el chorra (ven un partido de baseball, van en barco, cantan "Twist and Shout" encima de una cabalgata que forma parte de un desfile por el centro de la city,...incluso, se cargan el Ferrari). Finalmente, Ferris logra llegar, justo a tiempo, a casa sin que sus padres descubran que de lo único que estaba enfermo...era de los ochenta.
1.987 fue el año de "Mejor Solo que Mal Acompañado" (¿no les dije lo de los títulos?). En esta descacharrante comedia nos encontramos con un soberbio mano a mano entre dos grandes actores: Steve Martín, y el genial (y difunto) John Candy. El primero de ellos, un triste vendedor con tendencia a ponerse muy nervioso, pretende regresar a su casa para celebrar "Acción de Gracias". Sin embargo, y tras coincidir al coger un taxi, su destino quedará unido al simplón y simpaticote Candy.
Todo sale mal a partir de ese momento, y la vuelta a casa se convertirá en un suplicio. Se verán, incluso, obligados a compartir una habitación en un motel (Martin: "¿Dónde está tu otra mano?"-Candy: Entre las almohadas"-Martin:¡¡¡Eso no son las almohadas!!!").
Como curiosidad,esta película fue clasificada en Estados Unidos como "R-Rating" (o lo que es lo mismo, no recomendada para menores de 18 años) porque en una escena de un minuto se utiliza la palabra "fuck" diecinueve veces. Y es que Martin se desespera de lo lindo.
De 1.985, al igual que "El Club de los Cinco", es "La Mujer Explosiva".
Dos superpringaos del instituto (uno de ellos es Anthony Michael Hall, actor fetiche de Hughes), hartos de no comerse un colín, deciden entrar en la base de datos del pentágono (supongo que hecha con Excel) para fabricarse una nena a su medida. El experimento les sale redondo y de la pantalla del ordenador sale una supertiti, Kelly LeBrock (the lady in red is dancing with me...), con un cociente intelectual superior al de Aznar y una actitud que ni el mismísimo David Lee Roth (ésta no es mía, pero es genial).
La pivita se percata de los panolis que son sus creadores y decide convertirlos en los tíos más guays de la ciudad y que las gachis caigan rendidas a sus pies (calzados con J´Hayber, por supuesto).

En 1.984, y gracias a esta película, se inauguró el género de las comedias románticas ambientadas en los High Schools, que tanto éxito tuvieron en los ochenta y que siempre echaban los fines de semana a las tres y media.

Samantha está loquita por Jake, el guaperas de turno (pero buena gente, esta vez), que no le hace ni puto caso, al igual que toda su familia que olvida su cumpleaños, demasiado atareados con la boda de su hermana mayor. Gracias a la amistad que entabla con Ted (Anthony Michael Hall), un auténtico tolay, pero que a la postre será el rey indiscutible de la peli, poco a poco consigue acercarse a Jake, quien, oh sorpresa, también siente algo por ella. Una fiesta salvaje y un par de baladas ochenteras harán el resto.

* Aquí concluye el primer repaso a la obra de John Hughes. ¡¡¡No se vayan todavía amigos, aún hay más!!!

5 Comments:

Blogger Milveinticinco said...

qué grande es Joh Hughes. Yo sigo siendo fanático del club de los cinco y de la de John candy y steve martin.

3:25 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Uno de sus más firmes defensores es Kevin Smith. De hecho, en el comic Chasing Dogma, Jay y Silent Bob siguen la pista de John Huges.
Muy buen blog hoy!

1:18 p. m.  
Blogger Pablo Mayoral said...

Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

2:18 p. m.  
Blogger Pablo Mayoral said...

Me quedo con todo en un día y mejor sólo que mal acompañado. Por cierto, ya que estamos entre cinéfilos:

¿Cómo se llama la peli en la que John Candy se liga a una tía de la ostia y le invitan a su casa por navidad (o acción de gracias, no recuerdo), pero en realidad se trata de una familia canibal que se quiere comer al bueno de John?

2:18 PM

2:19 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Qué buenos ratos me ha hecho pasar el Hughes este... Esas tardes tumbado en el sofá. Después... a andar en bici, al Trigal con Víctor y Joaco.... mucho mejor que ahora, pa que nos vamos a engañar.

6:49 p. m.  

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